Ahí estaba yo en pijama y con unas pantuflas cafés que me habían traído los “Santos Reyes”
…¡Todo era emoción!
Ponía atención al locutor que mencionaba al genial Gabilondo Soler; en aquellos momentos lo que deseaba era escuchar las canciones de “Cri-Cri” o “Grillito Cantor” plenas de ilimitada narrativa y creatividad. No sé cuánto tiempo pasó para aclararme el lío que se me formaba en la cabeza al tratar de entender algunas de las letras de mis canciones favoritas.
Muchos años después supe que:
“…Los grandes que no entienden el alma de los niños, prohibieron en alguna ocasión las canciones de Cri-Cri…”
Mis preferidas eran:
•”El Chorrito”,
•”Negrito bailarín”,
•”El ropero”,
•”La Patita”,
•”EL Ratón Vaquero”,
•”La Muñeca Fea”,
•”Caminito de la Escuela”
•”La Merienda”.
•”Cochinitos Dormilones”.
•”Marcha de las Letras”.
•”La Olla Y El Comal”.
•”Di Por qué”.
José Francisco Gabilondo Soler, “El Grillito Cantor” o “Cri-Cri “(1907-1990), quien nació un 6 de octubre en Orizaba, Veracruz, es recordado como uno de los más grandes compositores y referente en la creación musical infantil de México en el siglo pasado.
¡Un Genio!
“…Temas como “la ecología”, “el respeto a la diversidad”, “la importancia de la amistad” y “el valor de la honestidad” son algunos de los mensajes que Gabilondo Soler transmitió a través de su arte…”
Hombre muy versátil también incursionó en boxeo, toreo, natación, etc.
“…El repertorio del autor incluye 228 (por confirmar) composiciones, 121 de ellas grabadas, más de 500 personajes, 3,560 páginas de textos y cuentos. Uno de los aspectos más interesantes de sus canciones es que, por ser un producto de la radio, fomentan enormemente la imaginación de aquellos que las escuchábamos…”.
Por ahí leí y me gustó lo siguiente que transcribo a la letra:
“Francisco Gabilondo Soler recibió visa permanente para ingresar al “País de los Sueños” el 14 de diciembre de 1990,mientras dormitaba tranquila mente en su casa del Estado de México”.
Muchos años después, por mi dedicación al Turismo, visitando el “Pueblo Mágico de Coscomatepec, Veracruz” y hospedado en el histórico “La Posada del Emperador” (que entre sus huéspedes asiduos y distinguidos tuvo a Francisco Gabilondo Soler) me comentaron que un ropero del siglo XIX inspiró al compositor de música infantil para darle vida a la canción “El Ropero”. No bastando eso, una fuente ubicada en el patio inspiró “El Chorrito”.
”…que se hacía grandote y se hacía chiquito…
Porque el Chorrito tenía calor…”
Gabilondo Soler “Cri-Cri” fue un hombre que regaló muchas ilusiones y sonrisas a los niños que gustaban de escuchar su programa de radio. Pequeños y adultos de varias generaciones todavía hoy se alegran al escuchar cualquier melodía de su extensa recopilación. Sus composiciones musicales son famosas en América Latina y han sido traducidas a diferentes idiomas.
…y yo seguía imaginando al escuchar esas canciones de “Cri-Cri” aquellas mañanas antes de irme por ese “Caminito a la Escuela” para aprender “La Marcha de las Letras”, …Como relaté junto con las canciones transmitían un cuento de “Walt Disney” (otro personaje al que dedicaré su “Gastando Zapatos”).
Tiempos de infancia donde la fantasía e ingenuidad de la edad y de esa época nos permitían inventar y anhelar.
Tratemos que nuestros niños vivan esos sueños y que la tecnología (“celular”, “iPad”, “computadora” o “pantalla”) no rompan esas ilusiones y otras más como “los Santos Reyes”, “Santa Claus”, “la Coneja de Pascua” o “el Ratón de los dientes”…(lo recomendé en otro de mis escritos).
“Ciertas imágenes de la infancia se quedan grabadas en el álbum de la mente como fotografías, como escenarios a los que, no importa el tiempo que pase, uno siempre vuelve y recuerda”.
(Carlos Ruiz Zafón)
¡Gracias Gabilondo Soler!
¡Gracias “Grillito Cantor”!
¡Gracias “Cri-Cri”!